SIN SUELO NO HAY VIVIENDA, Y SIN VIVIENDA EL PRECIO SUBE
«Sin vivienda el precio sube» – Estas son las palabras de José Luis Ruiz Bartolomé, consultor inmobiliario. –
Si, por ejemplo, mañana el Ayuntamiento de Madrid cambiara radicalmente su postura sobre la vivienda y decidiera a favor de los promotores de Valdecarros , el optimismo cundiría en el sector.
No tendría un efecto inmediato en el ciclo puesto que, por mucho que se pusiera todo el mundo a trabajar en la transformación legal, antes de los próximos 4 o 5 años resultaría casi imposible.
Y es esta falta de inmediatez la que hace que las cosas se muevan tan despacio.
Parece que intuitivamente debería ser, al contrario: impulsar con ahínco lo que requiere más tiempo.
El problema es que no luce, y los políticos, siempre pensando en encuestas etc.., buscan fuegos de artificio.
El urbanismo es una tarea del día a día, de pico y pala.
Un quehacer obligado al que dedicar esfuerzos públicos y privados sin considerar la marcha de los ciclos, al margen de las apetencias y desganas de la coyuntura.
Si en los últimos años de la crisis hubiéramos trabajado los desarrollos de las áreas metropolitanas quizá ahora no estaríamos sufriendo esta escasez de oferta que está presionando los precios al alza.
El urbanismo es aparentemente muy rentable, porque la transformación de suelo no es especialmente costosa y, sin embargo, consigue añadir un enorme valor al activo.
Por el contrario, tiene dos grandes barreras: un gran consumo de recursos propios y un periodo de maduración muy largo y, lo que es peor, incierto.
Por eso es tan importante sentir el acompañamiento de las administraciones públicas en este proceso.